El glorioso Ejército Rojo detiene la ofensiva alemana

Defensa inicial de Rizokov

¡Trepidante, emocionante y divertida! Así se puede definir la partida que jugamos algunos miembros del Somatent del Club Alpha ares de Barcelona este viernes 16 de marzo. Últimamente le estamos pegando fuerte a Flames y la semana que viene llevamos un escenario del Norte de África a las Jornadas de Barnalúdica así que tocaba calentar motores y coger soltura con este reglamento. Sobra decir, que usamos la segunda edición a pesar de que la tercera ya está en el mercado.

Los alemanes llevaban tiempo suplicando por una oportunidad de revancha. Sus últimas intentonas se contaban por derrotas flagrantes y debían hacer algún avance si querían mantener sus opciones en el frente oriental. Las tropas del Mariscal Tresachen habían sido diezmadas y humilladas por los Sthraf soviéticos durante la ofensiva de Rizokov; pero no habían sido vencidos. Un intercambio de golpes y contragolpes pusieron el importante pueblo, de nuevo, bajo dominio alemán.

Tresachen quería una nueva oportunidad así que instaló su cuartel general en el puti..., esto, en la casa de citas de Rizokov donde estaba a buen recaudo del terrible invierno ruso. El Fuhrer se puso colérico ante el primer fracaso, pero decidió darle una segunda oportunidad. ¡No habría más! Tresachen no podía cometer más fallos así que preparó una defensa exhaustiva con el asesoramiento de Alarkonov, un zarrapastroso y renegado oficial ruso que se había vendido al enemigo por una tableta de chocolate y una botella de whisky de malta.

Preparando los neuerwerfer

El vil traidor recibirá su merecido castigo por tan deleznable deserción y abandono de sus hermanos de sangre. El camarada Stalin no dejará este crimen impune, pero antes había que detener el avance alemán. ¡Hasta el último hombre, ni un paso atrás! ¡Los teutones no llegarían a Moscú! Tresachen había pedido apoyo divisional y su querido jefe de Tigers, Josef Von Gutierren, se dirigía hacia Rizokov a socorrer las fuerzas alemanas cercadas al frente de una compañía de Tigers y una compañía de panzergranaderos mecanizados.

Plano general de Rizokov con las trincheras

Para la defensa del pueblo, Alarkonov había aconsejado poner alambradas, trincheras, campos de minas y bombas inteligentes. Para asegurarse la victoria había escuchado los lloros alemanes y había dopado la lista, no sólo con defensas, sino también con una compañía de HMG, 3 paks 36  y una compañía de panzerpioners armados hasta los dientes. Además, en su huida había robado unas cuantas baterías de neuerwerfer obtenidas como botín de guerra eso implicaba un Rizokov fuertemente defendido por artillería.

El camarada Stalin había dado la orden de recuperar Rizokov a toda costa. Para ello había movilizado al General Zhukov que dirigía enormes compañías de carros de la Guardia y tropas veteranas de la Siberia pero había enviado una avanzadilla para castigar las defensas alemanas antes de asestar el golpe definitivo. Zhukov no iba a exponer a sus mejores tropas teniendo hombres valerosos dispuestos a redimir sus crímenes con la Madre Patria. Una compañía de Sthraf –hombres liberados de los gulags- había sido movilizada con un único objetivo: combatir hasta el último estertor en Rizokov.

Para ellos sólo habían dos caminos posibles: Morir en la vergüenza del gulag, o convertirse en mártires y perecer con honor en el campo de batalla sirviendo como ejemplo a los jóvenes, que se lanzarían a emular a aquellos héroes que sacrificaron sus vidas por el pueblo ruso. Esta compañía de infantería estaba apoyada por ISU 122, ISU152, 3 Josef Stalin, una compañía de tanques de asalto KV1 y una compañía de T34/85 que llegarían en tirada de refuerzos a partir del turno uno. Para compensar un poco nos habían puesto tres turnos de artillería que yo hubiese cambiado gustosamente por más infantería. No me gusta demasiado la artillería contra alemanes en posición defensiva. Al frente de la vanguardia bolchevique estaban el comisario Segurovich, que dirigiría el asalto de la infantería, y Jaimov, veterano tanquista de los Guardias.

ISU en cobertura esperando a dar el zarpazo

Segunda batalla de Rizokov

Un silencio de muerte impregnaba el ambiente que rodeada la aldea de Rizokov. Sólo lo rompían las carcajadas de Tresachen que debía estar pasándolo genial tomando copas con el Mercenario, un viejo camarada de batalla que estaba supervisando el estado de las tropas en el frente oriental. Fuera, los soldados esperaban atentos el inmimente ataque. Los sonidos de los carros y el avance de la infantería eran ya inconfundibles. La chusma rusa estaba tras aquellos bosques esperando su oportunidad. El estallido de un obús zarandeó todo el cuartel general obligando a Tresachen a resguardarse bajo una mesa entregando el mando al traidor Alarkonov (¡Que vergüenza, dejar las tropas alemanas al mando de un ruso renegado! Hitler le contaría un chiste cuando le echase el guante).

La artillería soviética había empezado a rugir con un incesante bombardeo preliminar que obligó a los alemanes a refugiarse en sus trincheras y en sus nidos de tirador. La artillería nazi recibió la peor parte. El fuego concentrado comunista se llevó por delante varios werfer y un pak 36 dejando todas las unidades pineadas y atemorizadas. Aquello iba en serio. Los defensores no apreciaban movimientos ofensivos; salvo los enormes obuses, nada hacía presagiar un ataque.

Las primeras caricias de los obuses soviéticos dejaron este panorama entre los defensores alemanes

Las tropas rusas en cobertura dejaron hacer a su artillería que tenía la misión de ablandar las posiciones defensivas alemanas. Durante tres turnos, se machacó Rizokov que quedó hecho un cristo. Los refuerzos soviéticos llegaron puntualmente pero lo hicieron por el lugar menos indicado. Esto también influyó en la partida. La hizo más interesante y dinámica porque obligaba a variar la estrategia aunque en ese aspecto los rusos no tuvimos suerte. Tardaron muchos turnos en llegar a Rizokov a apoyar el asalto de la infantería penal.

En el turno cuatro, los rusos habían gastado todos sus obuses y todas las fuerzas aprontadas salieron de sus escondites cual marabunta y se lanzaron sobre Rizokov. Una compañía de ISU disparo sobre el flanco de los koningstiger aunque estos consiguieron salvarse de milagro y retrocedieron para evitar el fuego por el flanco. Poco más hicieron en toda la partida. El grueso de refuerzos se lanzó hacia el río para llegar cuanto antes a Rizokov, los Josef Stalin flanquearon para cubrir el avance de la infantería. Un potente URRAAAAAAAAAAA!!!! Se alzó por encima del sonido de las bombas cuando miles y miles de patriotas arengados por el comisario Segurovich salieron de los bosques a la carrera en pos de las alambradas alemanas.

Los Konings se ven obligados a retirarse para no ser desintegrados por el fuego de los ISU por el flanco

Los ISU se lanzan a abrir brecha en las alambradas

Varios ISU salieron por el flanco derecho de la infantería para machacar las alambradas, destruir un pak 40 y abrir una brecha en las defensas. Los refuerzos alemanes no llegaron, Tresachen estaba desaparecido y sólo Alarkonov y la esperanza de recibir refuerzos de Gutierren mantenían en pie el orgullo alemán. Los ingenieros intentaron asaltar los Josef Stalin que pasaban apuros sobre el río helado. Aún así sus lanzallamas y panzershreck no hicieron nada y fueron repelidos por el fuego de ametralladora con severas bajas. Los paks restantes escupieron sus obuses sin apenas consecuencias y los konings se quedaron a la expectativa.

Unidad de Sthraf en cobertura a punto de asaltar Rizokov

Un pak 40 saltó hecho pedazos y los tanques de asalto aplastaron las alambradas, recibieron bajas de fuego defensivo pero habían logrado abrir una vía hacia el pueblo. Los Sthraf se lanzaron al asalto a través del fuego de ametralladora, cientos de aquellos desgraciados teñían de rojo el suelo nevado pero su moral parecía de acero, no les importaba... para ellos era vencer o morir. El comisario no cejaba de gritar y motivar a sus valientes: “¡Avanzad, avanzad!, muerte al invasor fascista, muerte a los violentadores de la madre patria, por Stalin y el pueblo ruso, ¡Avanzad! ¡Gloria o muerte!

Todas las fuerzas rusas se lanzan al asalto. Un pak al fondo salta hecho pedazos. BREEEEEEEECHAAAA!!!!

ISU machacando paks

Los lanzallamas soviéticos calcinaron las HMG alemanas, los pioner en un intento desesperado de mantener la línea lanzaron un contra asalto que causó algunas bajas entre la horda rusa pero la superioridad numérica de éstos acabó por prevalecer acabando con todos los ingenieros y con el mando de compañía. La unidad de neuerwerfer estaba también a punto de retirarse. Los Strhaf asaltaron los paks restantes desbaratando toda la línea defensiva alemana y tomando el pueblo de Rizokov. Los refuerzos rusos cruzaban el río helado con graves pérdidas pero no importaba, Zhukov traía muchos más. Jaimov hizo un papelón reventando paks, neuerwerfer y todo lo que se le ponía por delante.

La marea de carros de Jaimov

Finalmente Josef Von Gutierren hizo acto de presencia. Con gran fortuna, sus refuerzos entraron por el mejor lugar; muy cerca del pueblo destruyendo a los ISU de apoyo y lanzándose al asalto de los Sthraf apoyados por los panzergranaderos. Aún así, un lanzallamas ruso puso fuera de combate un Tigre que quedó en medio de la carretera de entrada obligando a los panzergranaderos a dar un rodeo. Dejándolos muy lejos del objetivo. Los refuerzos de carros soviéticos ya estaban encima de Rizokov y pusieron fuera de combate otro Tigre. Los konings se cargaron dos KV pero la inquebrantable moral soviético les hizo superar los chequeos y permanecieron en el campo de batalla.

Los Tigers atenuaron el desastre alemán. Sin duda fue su mejor unidad

Los Tiger se llevan por delante una unidad de ISU

Toda la línea defensiva alemana había sido barrida.

Los Strhaf aguantaron literalmente hasta el último hombre pero finalmente todos fueron muertos. Estos héroes servirán de ejemplo a los jóvenes que vendrán detrás. Se portaron genial y habían ganado tiempo. El objetivo no era de nadie y decidimos proclamar un alto el fuego. Algunos teníamos que trabajar al día siguiente. Los cañones cesaron su ensordecedora cantinela y el repiqueteo de las armas de asalto cesó. Rizokov era un amasijo de ruinas, cadáveres y tanques calcinados. Algunos alemanes ocupaban una parte del pueblo la otra estaba abierta a los carros rusos. La ofensiva alemana había sido detenida, con graves pérdidas, pero ya tenían efectivos para avanzar. Las pérdidas alemanas eran calamitosas e irremplazables.

Los rusos entran al pueblo sin oposición acosados por los terribles Tigers de Gutierren

Jaimov al rescate

Los rusos habían sufrido unas pérdidas similares pero... en el horizonte se atisbaban las interminables columnas de carros de Zhukov. Los alemanes ya no tenían nada que oponer. De Tresachen no había ni rastro. Josef Von Gutierren puso a salvo las pocas tropas que le quedaban y embarcó a Alarkonov cuya vida peligraba si caía en manos comunistas.

Conclusiones

La partida fue muy emocionante y estuvo genial. Nos lo pasamos muy bien y nos reímos de lo lindo (sobre todo los rusos) porque a los alemanes se les ponía cara de póquer cuando sacábamos esos 6 imposibles a base de testiculina. En la anterior ocasión el despliegue era fijo y esta vez usamos la regla de refuerzos. Esto hizo variar la estrategia que quedaba condicionada según por donde entrasen las tropas. Probamos la artillería soviética que es muy bestia pero yo la hubiese cambiado gustoso por más tropas o tanques. Destruyó un cañón y algún neuerwerfer, pero su actuación no fue determinante. La verdad es que creo que no es la mejor opción cuando te enfrentas a tropas veteranas atrincheradas. No digo que esté mal porque pineas las unidades y apoyas los asaltos pero eso lo consigues igual con un platoon de morteros que son más económicos. Al final todo se reduce a que los alemanes son muy buenos y si defienden te ves obligado a sacar muchos 6 y eso es muy complicado.

El ejército patriótico retoma Rizokov

y esto es celebrado con fervor por Jaumov y Segurovich jejejejejej

Al final los ruegos alemanes fueron atendidos por la divinidad y les dieron no solo HMG, sino 6 neuerwerfer, 3 paks, bombas inteligentes, minas y fortificaciones. Vamos, una auténtica barbaridad. Aún así los rusos no nos quejamos, ¡Simplemente pasamos! De hecho, todas las unidades de refuerzo por las que tanto lloraron no fueron determinantes. Al final el papelón lo hicieron las unidades originales y los Tigers. Esto demuestra que los lloros y quejas alemanas eran injustificadas. Esas unidades con un uso eficaz eran más que suficientes para conseguir la victoria. (Jejeejejejej me sale la vena rusa).

La marea de Jaimov avanza sobre Rizokov

Empate táctico. Un amasijo de tanques yacen calcinados

Podríamos haber jugado un turno más pero decidimos que fuese empate, ambos bandos podrían haber logrado el objetivo. Aunque hay que señalar un pequeño conflicto al final en el que sorpresivamente, un Tigre que no llegaba al objetivo se puso dentro de rango racaneando un centímetro que los rusos consideramos como ilegal. Jajajaajajaj, aunque al final, se lo dejamos pasar porque luego hay que estar aguantándolos toda la semana y el objetivo es pasarlo bien.... Además también cabe decir –para que no se enfaden- que ellos nos pasaron también el poder cambiar el líder de una compañía de tanques muerto por un tanque normal.

La unidad rusa de la partida volvieron a ser los Sthraf. Valen cada punto que cuestan sin dudarlo. Nuestro principal error fue confiar demasiado en la artillería. Si hubiesemos asaltado un turno antes los alemanes simplemente no habrían podido pararnos.

También recuerdo un mando de compañía alemán que sorpresivamente avanzó 20 cm. no sabemos como y apareció de la nada para repetir un chequeo de moral alemán, que obviamente pasaron. Pero al final son gajes del juego y ya tenemos ganas de volver a jugar. Los avatares del juego quedan sobre el tablero.

23:59 El heroico sacrificio de los Sthraf ha convulsionado los gulags. Miles y miles de voluntarios se alistan en las filas bolcheviques para combatir al invasor. Cientos de miles de jóvenes campesinos tiran sus herramientas de labranza y se lanzan al frente empuñando un fusil. Es la guerra de liberación. Vengaremos las afrentas del enemigo fascista. Los caídos de Rizokov nos enseñarán el camino. La justicia sólo tiene una bandera: roja y decorada con una hoz y un martillo. URRAAAAAAAAAAA!!!! Sobra resaltar la veracidad y la imparcialidad del informe de éste modesto cronista que escribe para Pravda desde las trincheras rusas.