Esta navidad está siendo muy bien aprovechada. Entre otras cosas me ha dado tiempo a acabar un pedazo de juego de Visceral Games. Se trata de la segunda parte de la saga de Survival Horror, Dead Space. Me ha impresionado! No es un juego para enfermos del corazón porque no da tregua. La atmósfera está tan lograda que jugando con la luz apagada es difícil de aguantar durante más de una hora.Y es que, desde mi humilde punto de vista, supera en todos los aspectos a la primera parte. La música y los efectos se superan logrando que el personaje vaya por los pasadizos, con muy poca luz, buscando necromorfos por todas las esquinas. Se les oye, se les escucha jadear, sientes como se desplazan por los conductos de ventilación, sabes que están ahí pero no los ves. Esperan agazapados al momento más inesperado para saltar sobre ti.
No hay respiro! Ahora los acontecimientos suceden en una estación espacial superando con creces la duración que ofrecía la mítica USG Ishimura. Nuevas criaturas y los necromorfos más rápidos e inteligentes que yo haya visto os amargarán la existencia durante unas cuantas horas. No lo dudéis, si queréis disfrutar de un buen juego no dejéis pasar Dead Space 2.
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