Batalla por la fábrica de Mercius XIII

Los Rangers encabezando el avance capitolino

Las naves de desembarco capitolinas tomaron tierra en el pequeño planeta XIII del Sistema Mercius. Los informes facilitados por los servicios de inteligencia habían comunicado la existencia de grandes fuentes de mineral y una enorme fábrica para procesar Uranio. Las enormes flotas estelares nunca tenían bastante munición. Las, cada vez más, frecuentes escaramuzas con la Legión Oscura suponían un gasto constante de armamento y se debían conseguir flujos constantes de recursos para mantener la maquinaria bélica capitolina a la vanguardia de las megacorporaciones humanas.

Para tomar Mercius XIII se había aprontado una poderosa fuerza de asalto compuesta por una escuadra de infantería pesada y otra de ligera como huestes regulares dopadas con todos sus especialistas. Los marines de asalto darían la fuerza necesaria para romper cualquier línea y los Rangers de élite serían la fuerza de avance ideal para barrer cualquier obstáculo. Bill Bob Watts y Jake Krammer, leyendas vivas de Capitol, no quisieron perderse la expedición y se apuntaron dando apoyo a las tropas con su ametralladoras gemelas y los lanzallamas pesados. Algunos francotiradores se unieron a la fuerza de choque para eliminar posibles amenazas con sus disparos certeros.

Se preveía una operación sin mayores sobresaltos y el Alto Mando decidió que los oficiales nóveles Manel y James dirigiesen la misión de tierra mientras el Capitán John Segura seguía sus pasos con atención desde el puesto de mando. Mercius XIII no tenía árboles, no bosques, sólo colinas y edificios en ruinas. Aquello era una gran industria abandonada por quien sabe quien y quien sabe cuando, pero las instalaciones estaban en perfecto estado. Todo transcurría con calma hasta que una nave de reconocimiento transmitió un mensaje preocupante: "Una flotilla de Cibertronic ha sido avistada al otro lado de Mercius XIII, también se ha detectado un gran movimiento de naves de desembarco". "Halcón a Alto Mando, Halcón a Alto Mando... nos han descubierto......fsssshhhh".

Cibertrónic en el momento de su desembarco. Casi todos perecerían.

Capitol no tenía previsto un combate estelar y su flota tenía muy pocas naves de guerra, no se había previsto este contratiempo. Aún así, la fuerza de choque en tierra era lo suficientemente poderosa como para hacer frente a cualquier amenaza. El Capitán John dió orden a sus oficiales que tomasen aquellas industrias a cualquier precio mientras enviaba un mensaje a las naves de transporte para que estuviesen preparadas para embarcar a los efectivos ante cualquier conato de hostilidad de la poderosa flota Cybertronic. El objetivo era tomar la fábrica y aguantar hasta la llegada de la 3ª Armada de Capitol al sistema Mercius.

John estaba preocupado, los cibertrónicos eran duros y quizá había sido un error dejar el mando de las tropas a oficiales con poca experiencia. "Bueno, en algún momento deben llevar a cabo su bautismo de fuego, no es un objetivo prioritario para la directiva de Capitol y la experiencia les vendrá bien quizá dé sus frutos en futuras operaciones de mayor envergadura", "Asistente, prepare mi Purple Shark de todos modos por si se hace necesario intervenir".  "Si, señor!".

La infantería pesada comienza a avanzar y los marines de asalto se ESCONDEN EN EL EDIFICIO. De donde no saldrían hasta el final. Tengo que tomar serías medidas con mis oficiales adjuntos jejeje

Ambas fuerzas llegaron a las inmediaciones de las enormes instalaciones industriales. Los primeros informes habían identificado una poderosa fuerza de choque cibertrónica compuesta de Cazadores, Robots Espejo, infantería regular y de asalto con apoyo de un enorme blindado. Entre toda aquella marabunta destacaba un tío enorme que portaba una gran ametralladora. Sin duda, un héroe de Cibertronic... menos mal que Jake y Billy Bob estaban allí. La batalla sería encarnizada. Cibertronic inició las hostilidades lanzándose a por el objetivo. La infantería ligera se situó tras una colina mientras el blindado corría hacía el centro del campo de batalla. Los cazadores hicieron lo propio al otro lado de la mesa ocupando el campanario de un viejo edificio. Los robots espejo y las tropas de asalto avanzaron sin cobertura.

Los oficiales de Capitol decidieron adoptar una posición defensiva y no desplegaron ni usaron de la mejor manera las tropas a su disposición. Esto sería fatal. Los marines de asalto se parapetaron en un edificio a la izquierda y se pusieron en oportunidad mientras la infantería pesada avanzaba hacia la fábrica. John se tiraba de los pelos: ¡" Al revés, tenía que ser al revés, y que hace ese francotirador avanzando...HAY QUE SITUARLO EN EL TEJADO!". En el flanco derecho la situación era mejor... La infantería ligera se colocó en unas ruinas para cubrir el avance de los Rangers que se movieron tímidamente al sufrir una baja ante los disparos cibertrónicos. El francotirador tampoco fue bien situado pero la cosa más o menos iba bien. Jake se situó trás los Rangers y Billy Bobb apoyó el fuego de cobertura de la infanería ligera.

Los robots espejo pierden casi toda la escuadra ante el fuego capitolino y las tropas de asalto también empiezan a sufrir bajas. El héreo recibe dos heridas.

El movimiento de Cibertronic era temerario y pronto lo pagarían. A pesar del mal despliegue, las armas de Capitol comenzaron a rugir. Un poderoso fuego de mortero y ataques de bombarderos sembraron de muerte la vanguardia de Cibertronic, varios robots cayeron bajo esta descarga de destrucción. Cuando la cortina de humo desapareció, los cibertrónicos se levantaron y siguieron avanzando con valor pero siguieron siendo diezmados por el fuego de la infantería ligera y los Rangers. La unidad de robots espejo fue aniquilada quedando un sólo efectivo. Cayeron un par de marines de asalto y Billy Bob le hizo dos heridas al tio más grandote. Un par de Cazadores cayeron también bajo el fuego de precisión quirúrgica de Capitol. En el flanco izquierdo los marines de asalto usaron su oportunidad para frenar a la infantería regular pero: NO TENÍAN ALCANCE. Ese fue, el error de la partida sin duda.. la escuadra más poderosa que tenía que liderar el asalto con sus poderosas armas a medio y corto alcance había sido desplegado, inexplicablemente, EN RETAGUARDIA. James atenuó un poco el error destrozando el tanque de Cibertrónic con sus cazacarros y provocando algunas bajas entre el enemigo con el fuego de su infantería pesada que avanzaba hacia la fábrica.

Los cazadores intentan cubrir el avance cibertrónico desde el campanario. Pero sus heridos y muertos son cada vez más.

Cibertronic había pagado un alto precio por su avance habían perdido casi la mitad de sus efectivos en tres turnos pero estaban a punto de tomar la fábrica y eso era lo que contaba. El capitán John acudió al campo a relevar a sus oficiales que fueron enviados a retaguardia a meditar. La situación era preocupante, las informaciones más recientes avisaban de la pronta llegada de más naves de Cibertrónic a Mercius XIII... la velocidad era la clave y se había perdido un tiempo precioso. El último robot espejo y los restos de las tropas de asalto penetraron en la fábrica. Habían sufrido un duro castigo pero tenían el objetivo y no pensaban abandonarlo. La infantería ligera se dirigió a la fábrica para apoyar a sus hermanos de batalla y los cazadores batieron desde el campanario a los Rangers que se acercaban reptando hacia la fábrica.

Capitol sólo había sufrido tres o cuatro bajas pero estaba muy lejos del objetivo y Cibertronic pronto desembarcaría más tropas para apoyar a su primera oleada. Los capitolinos no tenían nada más. El oficial Ribeus de Cibertrónic tenía el objetivo gracias a un rápido golpe de mano. Ahora sus pérdidas eran lo de menos, si el enemigo queria la fábrica tendría que jugársela. El capitán John no tardó en hacer avanzar a sus marines de asalto a marchas forzadas. Éstos sorprendieron a la infantería ligera de Cibertrónic por el flanco lanzando sobre ellos una poderosa barrera de fuego. Los cibertrónicos perdieron cerca de la mitad de sus infantes, pero el resto consiguió reforzar la fábrica mientras que los marines y sus poderosas carabines estaban, simplemente, DEMASIADO LEJOS. Los Rangers y la infantería ligera capitolina seguían avanzando mientras limpiaban a los cazadores del campanario con tiros de precisión. Las pérdidas de Cibertrónic estaban siendo importantes pero cada vez estaban más cerca de vencer.

Tanque destrozado por el cazacarros. Muchos cibertrónicos dejaron su pellejo sobre el terreno pero consiguieron su objetivo

John dió la orden a la infantería pesada, que era la unidad más cercana a la fábrica, de avanzar y meter efectivos dentro de las instalaciones. Sólo había una oportunidad y aunque no era la mejor unidad para realizar aquella misión era la única que estaba en disposición de intentarlo. El robot espejo con sus deflectores absorvió mucho fuego de los infantes y al final cayó pero había dado cobertura efectivo al equipo de asalto Cibertrónico. Todos los robots estaban destruidos pero Ribeus tenía claro que estaban para eso. Las tropas del interior de la fábrica usaron su oportunidad para batir con las lanzallamas y sus grandas a la primera línea de tropas capitolinas que intentaban penetrar en la fábrica. En el intercambio de fuego el héroe de Cibertrónic sufrió su última herida y pereció junto a un par de soldados, pero las pérdidas capitolinas habían sido mayores. El asalto a la desesperada y sin suficientes fuerzas fue desbaratado y los pocos hombres que penetraron en la fábrica fueron fácilmente reducidos.

John no estaba contento! Iba a perder aquel objetivo casi sin sufrir bajas! El ruido de las balizas de desembarco de Cibertrónic le hizo apartar sus pensamientos. El objetivo estaba perdido y no quería que sus fuerzas sufriesen bajas inútiles. John ordenó retirada, más tarde se reuniría con sus oficiales para ver si habían aprendido algo de los cibertrónicos aquel día. "Espero que hayan comprendido que en la guerra hay que asumir pérdidas si quieres conseguir el objetivo". John miró hacia el horizonte mientras subía al transporte. Se llevaba un mal sabor de boca porque aquella fábrica podría ser de Capitol. Ahora sin embargo, las filas de robots invadían las instalaciones. "En fin, los chicos ya tienen experiencia y casi no hemos tenido bajas... volveremos a Marte e informaremos a la Junta para que preparen una fuerza de invasión mayor". El ejército de Capitol abandonaba Mercius casi intacto pero con el mal sabor de boca por los errores cometidos. Los jóvenes oficiales habían aprendido la lección a costa de muy pocas bajas... la cosa no había ido tan mal.

23:59 La partida se perdió por mantener una posición defensiva durante demasiados turnos. Cibertronic perdió la maýoría de sus tropas... pero llegaron al objetivo y cuando Capitol quiso reaccionar ya era demasiado tarde. Podríamos haber jugado más turnos y quizá Capitol finalmente se hubiese impuesto por superioridad numérica pero.... estaba decidido que aquel iba a ser el último turno. Los de Cibertrónic se defendieron con valor y consiguieron repeler a la infantería pesada. Parece una tontería pero si uno de aquellos capitolinos hubiese permanecido vivo en la fábrica la partida habría acabado en empate. Sin embargo Ribeus mostró el arrojo que se le exige a un buen oficial en los momentos difíciles... ese que nos faltó a los capitolinos  en los primeros turnos. Sus chicos sufrieron de lo lindo pero aguantaron y se merecen su premio: el control de Mercius XIII.... por ahora....

Moraleja: Pese a todo, Jaime y Manel dejaron cosas buenas y seguro que en la siguiente partida no cometerán los mismo errores... Chicos! Capitol os necesita! Ahora ya sabéis como usar los francotiradores y que los marines de asalto tienen que avanzar. Al final objetivo cumplido, muchas risas y una gran partida con los amigos y compañeros del Somatent.